Ederson Villamizar un brillante ingeniero Geofísico egresado de la Universidad Simón Bolívar con un promedio de 4,24/5 y de nuestro programa de Excelencia. Vivió toda su vida junto a su familia en los Frailes de Catia, en Caracas. En el 2016 se hizo merecedor de la Beca Internacional y la cual pudo disfrutar entre los meses noviembre y diciembre en Selnate International School, en Provo, Utah.
Villamizar a principios de mes inició estudios de maestría en la Universidad Memorial de la provincia de Newfoundland en Canadá, donde concursó por una beca y fue aceptado con una propuesta del 100% de exoneración de pago de matrícula y una invitación a trabajar en calidad de asistente de investigación, ingreso que le permitirá sobrellevar los costos del programa los próximos dos años gracias a su proyecto de investigación presentado a la universidad para ser aceptado en la maestría.
A continuación dejamos parte de lo que fue su experiencia en Estados Unidos.
“Tengo muchas cosas de lo cual escribir que hace que me sea difícil iniciar. Este viaje ha sido una experiencia muy profunda. Cuando me enteré que iba a viajar a los Estados Unidos y que me quedaría de noviembre a diciembre, inmediatamente pensé en 3 fechas importantes: Acción de Gracias, Viernes Negro, y la temporada de invierno. Estos tres temas me tenían realmente emocionado. Luego llegue a Provo en Utah y fui asignado con una familia Americana, Los Holmes. Desde el primer día de mi estadía logre tener una excelente conexión con ellos y me di cuenta que no solo había venido a este lugar a mejorar mis habilidades de inglés. Antes del primer día de clase en la Escuela Internacional Selnate, tuve que tomar una prueba de ubicación de inglés. Estaba un poco asustado porque sentía que mi inglés no era tan fluido, sin embargo, tuve la sorpresa de alcanzar el nivel para la clase más alta que la escuela tenía. Fui ubicado en el nivel 5B de preparación para la prueba TOEFL. Tuve clases de redacción y gramática, para mejorar la parte auditiva, oral, la lectura, y clases de preparación para la universidad. En mi primer día de clases conocí personas de Hong Kong, China, Laos, Arabia Saudita, México, Argentina, Taiwan, y Japón. Durante este mes, llegué a conocer en profundidad algunos de mis compañeros de clases. Los profesores fueron asombrosos, siempre dando lo mejor para explicar definiciones difíciles, corrigiendo nuestras pronunciaciones, y alentándonos a dar lo mejor de nosotros mismos. Disfrute las clases de escritura y oratoria porque podía hablar y escribir acerca de las similitudes entre Estados Unidos y Venezuela. También hable de mi cultura y durante este periodo aprendí diversos aspectos de los países y culturas de mis compañeros. Algunos días después de haber llegado a Provo, logré ver la nieve por primera vez. Como podrán saber, nosotros los venezolanos no tenemos este tipo de clima en nuestro país por lo que fue una gran experiencia. Durante mi mes en los Estados Unidos, también aprendí la cultura de reciclaje que ellos practican. Ellos tienen cestas para distintos elementos, y una vez con mi padre fui a una tienda de reciclaje para vender una vieja plancha que tenían. A pesar que la paga no fue tan alta, me sentí cómodo y sabía que estaba haciendo algo bueno por el ambiente. Provo es un desierto rodeado por las Montañas Wasatch. Tienes las montañas en todas las direcciones y tuve la oportunidad de admirarlas con y sin nieve en ellas, la vista es simplemente mágica. Mi familia de acogida me regaló el mejor intercambio cultural de todos. Además, gracias a ellos descubrí una característica de mi personalidad que no recordaba. Su práctica dando su servicio a otras personas sin esperar nada a cambio, así como solía hacer en Venezuela y con mi familia AVAA. Ellos son el mejor ejemplo de compromiso y profundamente deseo que pueda dedicar mi vida con la misma pasión que ellos. Agradezco a AVAA, Education USA, y a la Embajada Americana en Venezuela por haberme dado esta oportunidad, y por siempre haber creído en mí. Sin saberlo, me regalaron el mejor regalo de navidad de mi vida. Espero que mis acciones y resultados demuestren lo agradecido que me encuentro de esto; espero nunca decepcionarlos. A la Escuela Internacional Selnate, muchas gracias por haberme recibido, gracias por abrirme sus brazos y haberme transmitido conocimiento en mí. Gracias Ms. Stephanie, Mr. Tracy y Ms Karen por tomar mi mano y haberme dado una gran experiencia. A mis profesores del Selnate, gracias por abrirme sus corazones y por todo el amor que me dieron. Definitivamente, Dios trabaja de maneras misteriosas. Llegue aquí con tres expectativas en mi maleta, pero ahora saldré de Provo con una maleta llenas de memorias. Tengo una maleta llena de gratitud, familia y Dios”.
Prensa AVAA